Es común ver a la gente tirada en la arena de la playa, exponiendo su piel, sin piedad, a las radiaciones solares, friéndose con aceites rojos o anaranjados, mientras imaginan el bronceado tropical que van a lucir al día siguiente o esa misma noche.
Pues, aunque suene trillado, ese color a lo Julio Iglesias o a lo Luis Miguel no les va a servir de mucho cuando empiecen a aparecer las manchas, los carcinomas, las arrugas y hasta el cáncer de piel.
‘El sol es bueno. Da vida al sistema inmunológico, pero puede causar foto envejecimiento de la piel, hacer aparecer tumoraciones benignas y malignas, sin contar las quemaduras de segundo grado, pigmentaciones y aparición de queratosis actínicas que pueden llevar a carcinomas’.
Aunque los que se acuestan bajo el sol como tejas no están pensando en los posibles beneficios que pueden proporcionar las radiaciones solares en sus organismos, es conveniente que al menos sepan las contraindicaciones de esta exposición.
Dependiendo del tipo de piel, las personas se mostrarán más o menos sensibles a los rayos solares. Este es un principio que ha sido comprobado ‘en carne propia’ por los más blancos. Las pieles oscuras presentan un riesgo menor de padecer manifestaciones cutáneas producto de las radiaciones solares, porque tienen más melanina y desarrollan rápidamente una nueva pigmentación. En cambio, rubios y pelirrojos tienen grandes posibilidades de sufrir eritemas. Haga clic aquí para ver más artículos interesantes
La edad también puede ser un condicionante del efecto del sol sobre el cuerpo. Niños y viejos son susceptibles a las radiaciones por tener piel más delgada. Sin embargo, el sol es bueno para activar la vitamina D y atacar la osteoporosis.
Degradación de colores
Ir a la playa y no quemarse, es un hecho mal visto entre los venezolanos, aunque al único que le importe la falta de bronceado sea al mismo pálido. Es por eso que para evitar la autocompasión, se lanzan a una carrera contra el tiempo y procuran ‘aprovechar’ el sol desde que amanece hasta que se oculta. ‘Exponerse a las radiaciones solares entre las 10:00 am y las 2:00 pm resulta muy dañino para la piel, porque los rayos pegan perpendicularmente sobre las personas. Es conveniente que las personas utilicen los protectores solares, aunque a veces éstos no son suficientes’.
Otro caso es el de las personas que creen que por haberse untado un bloqueador solar identificado con un número alto, como el 45, no necesitan preocuparse más por el sol. El especialista explica que los números en los protectores sólo indican el tiempo que puede durar ese bloqueo, ‘pero deben estar pendientes de volver a ponerse más cantidad del protector cada vez que salgan del agua’.
Además, de acuerdo con el dermatólogo, la tendencia europea con respecto a los bloqueadores solares es a eliminar el número y dejar sólo la especificación: ‘protección mínima, media o máxima’.
Tropicalmente sanos
La primera etapa del bronceado es la directa e inmediata provocada por el oscurecimiento de los gránulos de melanina, es inducida por los rayos ultra violeta A, mejor conocidos como UVA. Las quemaduras superficiales son producidas por los rayos utravioleta B, UVB. A la larga, pueden generar carcinomas y cáncer.
‘Los protectores solares son preparados de aplicación tópica que sirven para absorber o reflejar los rayos ultravioletas para proteger la piel de los efectos agresivos y pueden permitir o no el bronceado estético’, explica Rondón Lugo. Esos protectores pueden ser ‘físicos que reflejan la luz’ o químicos ‘que absorben o modifican las radiaciones ultravioletas’.
De acuerdo con el especialista los protectores químicos se dividen en protectores solares y pantallas solares que no dejan pasar ni las radiaciones UVA ni las UVB. ‘Siempre que uno busca un bloqueador es conveniente que tenga un protector físicos y pantallas solares’.
Existen simuladores del bronceado que son sustancias que dan un tono oscuro a la piel y coloración resistente al agua, pero también hay bronceadores artificiales que se toman por vía oral que tienen betacarotenos y dan un aspecto bronceado ‘pero presentan el problema de que, a la larga, pueden causar daño hepático’, dice el especialista.